En Venezuela la verdadera transformación en positivo en educación y ciudadanía la podemos lograr el día que asumamos a nivel individual y colectivo el “yo soy responsable” en vez del usual “tu eres el responsable”. Una característica de la conducta infantil es proyectar ilusiones y no asumir responsabilidades. En nuestro mundo adulto de conductas infantiles frecuentes se vive huyendo hacia adelante, huyendo de uno mismo y cerrando los ojos frente a la realidad y su correspondiente cuota de sacrificios y responsabilidades. Es usual entre nosotros el trasladar nuestras responsabilidades a los demás así como nuestros males y desdichas siempre son causados por los demás y cuando no tenemos a nadie para “echarle” la culpa se inventa aquello de que nos volvimos “locos” o fue el diablo y en el caso de los hombres la culpable fue una mujer. Conductas y actitudes propias de individuos con una fuerte carga de orfandad psíquica y afectiva y una cultura machista dominante. El asunto es cómo evadir nuestras responsabilidades, la idea es no exigirnos ni rendir cuentas. Somos excelentes y consecuentes “críticos” pero desconocemos la autocrítica. Entre nosotros se cumple a cabalidad el dicho evangélico de que vemos la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. En nuestra sociedad la libertad es asumida y entendida como el hacer lo que me da la gana y la tendencia al bochinche y la anarquía. Muy lejos estamos de la libertad asumida como autolimitación, respeto a los demás y asunción de responsabilidades. Las consideraciones anteriores no pretenden caracterizar a toda nuestra sociedad, sería injusto con millones de personas adultos que asumen a plenitud sus responsabilidades, pero también es verdad que lo dicho anteriormente identifica muchas conductas cuya presencia y frecuencia en nuestras ciudades propician el caos y el desorden así como la ingobernabilidad que tiende a caracterizar nuestra vida social. En consecuencia es importante propugnar y practicar una educación y una ciudadanía desde la libertad responsable. Aprender a conjugar y armonizar el “yo” con el “nosotros” que es la relación en que se definen la sociabilidad y la cultura, la civilización y el progreso.
lunes, 19 de marzo de 2012
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DEPORAHI: Yo lo hubiese escrito mejor! pero es que me quito las palabras de mi pequeña bocota..... ;), he aqui la verdadera idiosincracia venezolana, lo bueno y lo malo que debemos en realidad atacar y reforzar: Dios lo Bendiga Angel Lombardi, se le recuerda siempre!
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