La concepción de la Universidad medieval que surge básicamente como comunidad del saber, como comunidad en permanente búsqueda de la verdad, se ha mantenido no sólo legalmente, sino que en la práctica no existe ninguna Universidad que se respete, que haya renunciado a este postulado.
Esta Universidad que gira en torno a la investigación y a la ciencia, en términos históricos y sociológicos, se tiende a identificar con el llamado modelo alemán de Universidad, concretamente, con la Universidad que surge en Alemania con la Universidad de Berlín a comienzos del siglo XIX. Este modelo identifica el modelo anglosajón que privilegia la investigación y la creación de conocimiento.
La Universidad de hoy, que no ha renunciado a ser un espacio para la investigación, se encuentra ante la disyuntiva de acceder a un escenario en donde el mercado ha pasado a ser el eje de organización de la sociedad y la revalorización del conocimiento, como una estrategia que nos permita formar parte de la economía política, relacionando directamente formación con empleo.
El segundo modelo de Universidad es la que tiene como misión primordial la formación de los recursos humanos, este que privilegia la relación entre docentes y alumnos, tiende a identificarse con el llamado modelo francés o modelo profesionista. Después de la Revolución Francesa, la universidad francesa lo asume como modelo administrativo que va a responder a las políticas del Estado y a las necesidades de la sociedad.
Si Alemania y Francia fueron las cunas de los modelos paradigmáticos universitarios con acento en la creación de conocimientos o en la formación de profesionales, a nivel de extensión, es la universidad Latinoamérica la que asume a cabalidad y con clara conciencia, especialmente, a partir de los acontecimientos de Córdoba (1918), esta función entendida como el compromiso social y político que tiene la institución universitaria con su tiempo y con su época, es decir, la relación de la Universidad con el Estado y la sociedad, tal como se ha evidenciado en nuestros procesos políticos y el protagonismo estudiantil en los mismos.
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