El domingo 19 de octubre llegando a Maiquetía; el aeropuerto estaba sin electricidad, poco después me entero que en Maracaibo tampoco había energía eléctrica, algo ya habitual en el país. Reflexionando como es natural, sobre el hecho, sin embargo mi inquietud se orientó no a los apagones que estamos experimentando los venezolanos, por lo demás un nuevo aprendizaje de la era chavista, producto de las pocas luces que están demostrando nuestros gobernantes, que después de 10 años y con los mayores ingresos petroleros de toda su historia, el país esta más empobrecido que nunca y mucho más dependiente y vulnerable a pesar de la “chatarra” y “juguetería” militar que estamos comprando.
Los Venezolanos de esta hora estamos al final de la fiesta, la fiesta se acaba y los que no quieran darse cuenta, despertaran en el 2009, cuando la economía nos alcance a todos en especial a los más pobres y a quienes vivimos de un ingreso fijo.
Para los corruptos y aprovechadores del erario público, en general y funcionarios de altos salarios y “otros” beneficios, para ellos no hay crisis y por consiguiente no aceptan que hablemos de ella. Son los “optimistas” mientras quienes anticipan tiempos difíciles son los “pesimistas”, los profetas del desastre y es que en Venezuela 80 años de capitalismo rentista y estatismo exacerbado nos ha hecho creer y tomar en serio la creencia que somos el país de el Dorado, cuando en realidad lo que hemos tenido han sido gobiernos ricos y pueblo pobre y un 20% de privilegiados.
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